El pasado domingo nos lanzamos a la conquista de castillos. Como era lógico comenzamos por los del país vecino, Portugal.
Entramos por Villanueva del Fresno donde quedamos para concentrar a todos, ya que procedíamos de diferentes lugares. Tras saludarnos y charlar un rato pusimos rumbo a Mourao, primera conquista del día. Llegamos casi a la hora de cerrar pues no contábamos con que en Portugal llevan una hora menos que nosotros pero con todo nos dio tiempo a recorrer sus murallas y torres, y no son pocos los que tiene, que cuenta con un total de 11 torres. En su recorrido nos llamó la atención su diseño abaluartado irregular e hicimos no pocas cábalas en la forma en que sus moradores defenderían la posición frente a un terrible enemigo dispuesto a arrebatarles el castillo.
De aquí y montando nuestros corceles metálicos nos dirigimos sin más perdida de tiempo al alentejano pueblo de Monsaraz.
Aquí podemos contemplar la fortaleza, las murallas defensivas y sus siete iglesias. El castillo dominado por la Torre de Menagen tiene una planta pentagonal que hace las veces de plaza de toros, la cual estaban preparando durante nuestra visita.
En la plaza destaca una picota dieciochesca de gran belleza coronada por una esfera del universo.
Sentados en las murallas exteriores podemos contemplar un bello paisaje conformado por alcornoques, olivos y la gran masa de agua de la presa de Alqueva. Estos parajes esconden los llamados “falos de Monsaraz”, monumentos megalíticos, cromlechs, dólmenes y menhires considerados como los mejores ejemplos de toda la Península Ibérica, pero esto lo dejaremos para una próxima visita.
Regresamos a Mourao para comer y despedir a Rafa y Polvorilla.
Una vez terminamos nos enteramos que los vinos de una cooperativa del lugar obtuvo el premio al mejor vino del mundo en el año 80.
Nuestra siguiente parada es Jerez de los Caballeros donde tomamos café y unos exquisitos dulces.
Juan nos espera en Burguillos del Cerro para hacer estos últimos kilómetros juntos. De aquí poco a poco nos vamos separando de regreso a nuestras localidades. Fotos de Mamen y Kapy
Entramos por Villanueva del Fresno donde quedamos para concentrar a todos, ya que procedíamos de diferentes lugares. Tras saludarnos y charlar un rato pusimos rumbo a Mourao, primera conquista del día. Llegamos casi a la hora de cerrar pues no contábamos con que en Portugal llevan una hora menos que nosotros pero con todo nos dio tiempo a recorrer sus murallas y torres, y no son pocos los que tiene, que cuenta con un total de 11 torres. En su recorrido nos llamó la atención su diseño abaluartado irregular e hicimos no pocas cábalas en la forma en que sus moradores defenderían la posición frente a un terrible enemigo dispuesto a arrebatarles el castillo.
De aquí y montando nuestros corceles metálicos nos dirigimos sin más perdida de tiempo al alentejano pueblo de Monsaraz.
Aquí podemos contemplar la fortaleza, las murallas defensivas y sus siete iglesias. El castillo dominado por la Torre de Menagen tiene una planta pentagonal que hace las veces de plaza de toros, la cual estaban preparando durante nuestra visita.
En la plaza destaca una picota dieciochesca de gran belleza coronada por una esfera del universo.
Sentados en las murallas exteriores podemos contemplar un bello paisaje conformado por alcornoques, olivos y la gran masa de agua de la presa de Alqueva. Estos parajes esconden los llamados “falos de Monsaraz”, monumentos megalíticos, cromlechs, dólmenes y menhires considerados como los mejores ejemplos de toda la Península Ibérica, pero esto lo dejaremos para una próxima visita.
Regresamos a Mourao para comer y despedir a Rafa y Polvorilla.
Una vez terminamos nos enteramos que los vinos de una cooperativa del lugar obtuvo el premio al mejor vino del mundo en el año 80.
Nuestra siguiente parada es Jerez de los Caballeros donde tomamos café y unos exquisitos dulces.
Juan nos espera en Burguillos del Cerro para hacer estos últimos kilómetros juntos. De aquí poco a poco nos vamos separando de regreso a nuestras localidades. Fotos de Mamen y Kapy
Menos mal que ya hemos estado por allí en otra ocasión, si no, me moria de envidia, pues me encanta visitar los castillos. Veo que vosotros ni Domingo de Pascua ni ná. Pues nada, nada, a rodar, que se de buena tinta que Jesus tambien viajaba en "burra" de pueblo en pueblo predicando. Si hubiera podido, seguro que se hubiera comprado una moto (custom o R ?). Bueno, los sufridores que han vivido la pasión a pie de procesión, os saludan. Salve.
ResponderEliminarSalve mochuelo secretario y seguro que tu buen Jesús hubiera ido en custom
ResponderEliminarBonita ruta, que pena no haber podido acompañaros.
ResponderEliminarSaludos.
Tranquila Nujulsen. Habrá otras a las que si podréis participar y que seguro serán tan interesantes como esta.
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